¡Vamos,jaca amiga...! Alfonso Galán García.
Al trote por los caminos,
al paso por las veredas,
oyendo el canto de arroyos
brindándome agüita fresca,
voy anhelante en mi jaca,
de pura raza extremeña,
por campos y serranías
de mi Extremadura bella.
Caminos que entre encinares
se pierden y culebrean,
veredas que obstruyen el monte
cuajado de espesa breña,
arroyos que van deprisa
susurrando cantinelas,
son los testigos más fieles
de la prisa, y la impaciencia,
que mi jaca y yo llevamos
por llegar donde está ella;
mi jaca, por sus caricias,
y yo porque ansío verla...
¿Qué importan sed y fatigas?..
¿Qué el sudor que nos chorrea?..
¿ Qué el pegajoso bochorno
de la siesta veraniega,
que aplana y rinde a mi jaca,
y tuesta mi piel morena..?
Mientras mi jaca cansina
resopla, suda y jadea,
subiendo los altos cerros,
y descendiendo laderas,
rompiendo voy el silencio
abrumador de la siesta,
que duerme al son de mi copla
y el jadear de mi yegua...
Allá en un blanco cortijo
en la cuesta de una sierra,
oculto entre las encinas
ramosas que le sombrean,
y al amparo de un mastín
de raza, que espía y vela,
está esperando impaciente
mi extremeña cortijera...
Corre, relincha, galopa,
jaca amiga y compañera,
que el sol sin lumbre resbala
lentamente tras la sierra,
y puede que esa mocita
cortijera, que me espera,
vacía de amor suspire...
¡Vamos, jaca amiga, vuela,
relincha para que oiga
que estamos cerca, muy cerca.
Poema extremeño presentado por Francisco José Reina Corbacho (2º Bachillerato C)
